Internet es una gran herramienta, nos da la oportunidad de escribir a tipos como yo, sin ningún tipo de talento literario (ni de otro tipo) y sentirnos orgullosos de ello.
Hoy escribiré sobre la vida, generalmente referida como un valle de lágrimas, y a la vez nuestro bien más preciado, pues nuestro instinto de conservación ahí esta, haciendo acto de presencia, como un auténtico jabato, porque sin él, a la más minima contrariedad estariamos criando malvas el 99% de los seres humanos. (el 1% restante se quedaría para contarlo en un blog con porcentajes sacados de la manga, como un servidor)
Pero, a fín de cuentas, el desgraciado es agraciado, y puede incluso que os pregunteis por que razón digo esto, aparte de porque me gustan las paradojas y las contradicciones, (¿que es la vida, sino una constante contradicción?) porque realmente en los momentos de más angustia y cuando hemos tocado fondo, en ese preciso instante se realiza la prueba de fuego, donde descubres que eres el elegido*; es como cuando tienes una pesadilla y el asesino/monstruo/loquesea va a matarte/engullirte/loquesea, en ese momento adquieres la consciencia de que es tu sueño y puedes modificarlo a voluntad, sopreponiendote a cualquier dificultad que pudiera surgir y fulminando/dando por culo/loquesea al asesino/mostruo/loquesea.
Para finalizar, podría haber resumido todo esto en una frase, ahorrandome toda la parrafada, pero me apetecía explayarme.
La frase es la siguiente:
"
La vida es un sueño, y los sueños, sueños son."
Dedico este artículo a mi plumífero amigo, el Loro Traductor, y a todo aquel que no esté pasando por su mejor momento, es decir, el 99%.
* En referencia a Matrix.